El Labrador y la Cigüeña
Fábulas de Esopo
Un Labrador colocó trampas en su terreno recién sembrado y capturó un número de grullas que venían a comerse las semillas. Pero entre ellas se encontraba una cigüeña, la cual se había fracturado una pata en la trampa y que insistentemente le rogaba al labrador le conservara la vida:
— Te ruego me liberes, amo, sólo por esta vez. Mi quebradura exaltará tu piedad, y además, yo no soy grulla, soy una cigüeña, un ave de excelente carácter, y soy muy buena hija. Mira también mis plumas, que no son como las de esas grullas.
El labrador riéndose dijo:
— Será todo como lo dices, pero yo sólo sé esto: Te capturé junto con estas ladronas, las grullas, y por lo tanto te corresponde morir junto con ellas.
FIN
Quien se asocia con el malvado, con él perece.
Que tanto saben de la fábula El Labrador y la Cigüeña
Es hora de poner a prueba los conocimientos de tus niñas y niños sobre la fábula El Labrador y la Cigüeña. Elaboramos un cuestionario de preguntas para tus peques.
- ¿Cómo se llama la fábula?
- ¿Qué personajes aparecieron en la fábula?
- ¿Quién fue el presonaje principal de la fábula?
- ¿Cuál fue tu parte favorita de la fábula?
- ¿En que lugar ocurrio la fábula?
- ¿Inventa otro final para la fábula?
Fábulas para niños que también te puede interesar!

El Lobo con piel de oveja
Pensó un día un lobo cambiar su apariencia para así facilitar la obtención de su comida. Se metió entonces en una piel de oveja y se fue a pastar...
Leer más
Afrodita y la Gata
Se había enamorado una gata de un hermoso joven, y rogó a Afrodita que la hiciera mujer. La diosa, compadecida de su deseo, la transformó en una bella doncella,...
Leer más
El Camello visto por primera vez
Cuando los humanos vieron por primera vez al camello, se asustaron, y atemorizados por su gran tamaño emprendieron la huida. Pero pasado el tiempo y viendo que era inofensivo,...
Leer más
La Zorra y los racimos de uvas
Estaba una zorra con mucha hambre, y al ver colgando de una parra unos deliciosos racimos de uvas, quiso atraparlos con su boca. Mas no pudiendo alcanzarlos, a pesar...
Leer más
El Caballo, el Buey, el Perro y el Hombre
Cuando Zeus creó al hombre, le concedió unos pocos años de vida. Pero el hombre, poniendo a funcionar su inteligencia, al llegar el invierno edificó una casa y habitó...
Leer más